(continuación del post de Diego) La escena musical de San Diego (California), especialmente la relacionada con el hardcore y derivados, es notoria por producir bandas que redefinen sus géneros. También es la cuna de The Locust, banda formada por miembros de Swing Kids y otras bandas del área en 1994, que en lugar de redefinir un género eligieron destruir la música a través de agresión pura y una combinación brillante de elementos. Utilizando los instrumentos clásicos de la música extrema (guitarras, bajo, batería), agregando sintetizadores análogos con verdadero desdén, y utilizando los gritos más abrasivos posibles, este grupo de músicos ha creado algo tan original como espeluznante. Agreguemos a esto sus presentaciones en vivo, donde se plantan 4 ó 5 individuos con trajes completos y ajustados de nylon, a veces con máscaras de insecto (langostas, posiblemente), todos en fila. Decir que se ha presenciado la destrucción de la música como se conocía es como decir que Alfonso Portillo se robó un par de quetzales, o nada.
Luego de varios splits y EPs, The Locust saca en 1998 su primer LP, titulado simplemente The Locust. 20 canciones en menos de 20 minutos (esto es un LP para ellos, quién soy yo para discutirlo), con una calidad de grabación equivalente a su respeto por las tradiciones (es decir, nula), el disco es una patada en los oídos. El sonido base es un derivado del grindcore y/o power violence, con pasajes centrados en los varios sonidos del sintetizador, y 3 ó 4 cambios bruscos de dirección condensados en canciones no más largas de un minuto. Creo que todos los miembros de la banda contribuyen a las voces, con un contenido lírico y títulos de canciones que roban de lo surreal tanto como de lo perverso. Es un disco fenomenal en su agresividad e irreverencia hacia todo lo que se conocía hasta ese momento, y mil veces más punk que lo que se autodenomina punk en estos días.
Es inútil escribir un review largo, es más corto y fácil descargar el disco y escucharlo. La banda con los años ha condensado su sonido, volviéndolo un poco más uniforme pero igual de impactante. Yo prefiero este disco por el hecho de ser totalmente incoherente de principio a fin. Pero lo más importante es que es divertido escucharlo. Sólo con ver la portada puede apreciarse que esta banda tiene un sentido del humor torcido en todo lo que hacen.
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como lo hemos discutido antes, el mejor disco de the locust en mi opinion, uno de los discos mas adictivos que he oido en mi vida. Muy buen review!
ResponderEliminarCon oir una pequeña parte del video, y de cosas q me recuerdo haber oido de ellos antes es suficiente para q baje el disco. Buen Review!!!
ResponderEliminarEl disquito chiquito :D si vos, the locust, es la orgía entre un NES con un taladro de dentista. Cada vez les voy agarrando más la onda, si hay que tener estómago para entrarles. Ahora lo que me llega es que a partir de bandas como The Locust le podés empezar a entrar a cosas como el power violence, el grindcore, el cybergrind, el "mathcore", etc
ResponderEliminarSi venís de un background distinto al hardcore, entonces sí estoy de acuerdo. Ahora si venís del hardcore, tuviste que haber llegado a The Locust por ahí. Yo los colocaría después del grindcore pero antes del cybergrind en términos de "extremo".
ResponderEliminarExcelente descripcion:
ResponderEliminar"..la chavita de El Exorcista, un Atari fumando crack, y una banda de grindcore en pleno concierto. Mientras todos se pelean por el último pedazo de pizza..."
Ja!, nunca habia leido algo parecido. Gracias a Inis descubri esta banda y la verdad si que son algo aparte. Excelente post.
Este es el disco que más me ha gustado de The Locust! alguien sabe si van a sacar algo e un futuro próximo?
ResponderEliminarYo lo ultimo que escuche que hicieron fue la colaboracion con los de Man is the Bastard en su proyecto de noise de Bastard Noise para el ultimo disco que sacaron Rogue Astronaut, el cual es muy bueno.
ResponderEliminarPues ya sería hora, van 2 años desde New Erections...
ResponderEliminarNo se si han oido Head Wound City, pero es un proyecto entre un locust, mas el guitarrista de los Yeah Yeah Yeahs y otro man de los Blood Brothers.
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